Frascos antiguos
Mientras limpio la playa, encuentro varios botecitos de cristal que ha traído el mar desde muy lejos. Son de aspecto farmacéutico y antiguo. Tienen un tapón de goma sellado con un aro de aluminio muy deteriorado. Podría utilizarlos para hacer un bodegón de boticario de la antigüedad. Vamos a ver qué sale.
Lo primero que hago es quitar los tapones de goma y aluminio para poder limpiarlos por dentro, puesto que los restos de líquido que contienen pueden ser desde corrosivos hasta tóxicos.
Una vez limpios, mido el perímetro para ponerles unas etiquetas nuevas.
Para ello, copio los centímetros de una regla en un papel que pueda circundar los frascos y apunto las medidas que quiero que hagan cada una de las etiquetas.
Busco imágenes en la red y me descargo unas etiquetas de medicamentos antiguos. Las adapto a las medidas deseadas, las imprimo y las recorto.
Ya las puedo pegar en los botes.
Ahora los puedo llenar con cualquier líquido con color para simular un medicamento.
Una vez rellenados les busco un lugar donde aparenten una reliquia de laboratorio o restos de una farmacia del siglo XIX.
Reutilizando y reciclando, reducimos el consumo y los residuos, además,
agudizamos la creatividad. ;·)